El Tribunal Superior de Justicia de Madrid confirma la improcedencia del despido de un abogado que tenía suscrito un contrato de colaboración con la empresa. Los magistrados consideran que la relación con el despacho era laboral, con independencia del acuerdo firmado.

La empresa es un despacho de abogados que se dedica al asesoramiento legal y tramitación judicial de asuntos materia de derecho aeronáutico (cancelaciones de vuelos, retrasos, equipaje, etc) y bancario (tarjetas revolving, gastos hipotecarios, cláusulas suelo, etc).

Mediante correo electrónico se le comunicó que la empresa había decidido dar por finalizado el contrato de colaboración. Despido que fue declarado improcedente por el Juzgado de lo Social.

Leer la noticia completa – click aquí