El cisma contributivo del sistema público de pensiones, por el que las cotizaciones que aportan cada mes empresas y trabajadores están lejos de cubrir el coste de las prestaciones de jubilación -y demás pagas de carácter contributivo-, no tiene visos de resolverse en el corto plazo a pesar del andamiaje previsto en la reforma aprobada por el Gobierno entre los años 2021 y 2023 para reforzar los ingresos de la Seguridad Social -y que ha sido completada en su totalidad con la reciente paquete de medidas acordado para incentivar el alargue de la vida laboral con incentivos para la demora del retiro y la mejora de los supuestos que permiten combinar la pensión con la percepción de un salario-.

Leer la noticia completa – click aquí