Emitir y recibir facturas siempre genera dudas entre los autónomos al comienzo de su actividad. Además del IVA, la retención del IRPF es un concepto que despierta muchas incógnitas. Cuando a los profesionales autónomos o a los emprendedores les llega una factura con retención de IRPF lo primero que debe hacer es archivarla y registrarla en su libro de gastos.

Esta retención suele ser del 15% del importe base de la factura. Es decir, el 15% del precio que se paga por un bien o servicio sin contar el IVA.

Leer la noticia completa – click aquí